El pasado día 30, se inició en Correos una serie de
movilizaciones para poner freno a una ola hora de recortes que ha tenido como
consecuencia que durante los últimos años más de 15.500 trabajadores y
trabajadoras se hayan quedado en la calle. A esto hay que sumar además la
rebaja en sus derechos laborales, la redistribución de plantilla de manera
caótica, la persecución de las bajas laborales y un largo etcétera.
Debemos recordar que Correos sigue siendo una sociedad
estatal, dependiente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales, y
que por tanto el Estado, a través del Ministerio de Hacienda, tienen una
responsabilidad ineludible en este conflicto. Sin embargo, la voluntad de
seguir en la senda de los despidos y en la rebaja de las condiciones laborales
hacen patente que la voluntad de los máximos responsables políticos es seguir
menguando el sector público, como ya han hecho en la Sanidad y en la Educación.
No hay que olvidar tampoco que ya hay rumores de una cercana
privatización de la Sociedad Estatal de Correos y Telégrafos, que ya se empezó
en 1999 con la entrada de Deutsche Bank en la entidad, y que tiene visos de
continuar si el Gobierno sigue en manos de especuladores.
Desde la Unión de Juventudes Comunistas de España apoyamos
las movilizaciones que lleven a cabo los empleados y empleadas de Correos y sus
representantes sindicales. También queremos sumarnos a sus reivindicaciones,
que pasan por el aumento de la plantilla y el mantenimiento del empleo, la
mejora de los salarios y , en definitiva, por unas condiciones de trabajo
justas. Hacemos un llamamiento también al conjunto del pueblo trabajador a
solidarizarse con este conflicto para la defensa de un servicio postal público
de calidad y con derechos laborales.
¡Adelante la lucha en Correos!